"Como si se tratara del más simple estornudo, Evo Morales, henchido de placer y orgullo, ha oficializado que su gobierno recibe, por la vía categórica, (directa y sin intermediarios) los petrodolarcillos que el variopinto presidente Chávez le envía en calidad de mesada para ejecutar proyectos.
Pero además, con un dejo de la más absoluta falta de criterio y tacto, ha mandado al carajo, (como la mayoría de las cosas) de un solo plumazo, los procedimientos legales que se requieren para retirar depósitos del Banco Central o del Tesoro General. Llamando a esta instancia, "trámites y más trámites", es decir, burocracia dura y pura.
"Cuando llega (el dinero) al Banco Central o al Tesoro General de la Nación (las entidades por donde habitualmente fluye la cooperación internacional) cuesta sacar la plata" debido a que debe cumplirse "trámite y más trámite".
"Por ésa y muchas razones, yo dije al presidente de Venezuela, Hugo Chávez que en vez de que me mande plata al Tesoro General de la Nación y después retirar el dinero va a costar tiempo por qué no más bien, de la misma Embajada, puede firmar la inversión directamente.
¡Vaya pragmatismo! A ver, tratemos de comprender este mensaje tan liberador que, desde mi punto de vista, tiene un contenido metafísico. Acaso lo que nos está queriendo decir el presidente Evo sea que cuanto menos obedezcamos a los procedimientos legales y naturales para ejecutar cualquier transacción, mayor será el resultado en términos efectivos..."
Fuente: lostiempos.com
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