martes, 4 de noviembre de 2008

Escasez de combustibles se extiende en Bolivia

Varias regiones del país soportan en las últimas semanas un racionamiento de carburantes, sobre todo de diesel y gas doméstico, que las autoridades atribuyen a un estancamiento en la producción y un crecimiento de la demanda interna

Largas filas de gente en las calles con botellones vacíos de gas doméstico y colas de vehículos en las estaciones de aprovisionamiento de diesel son imágenes cotidianas en las principales ciudades del país, dos años y medio después de la nacionalización de los hidrocarburos.

Los racionamientos alentaron el surgimiento de revendedores callejeros a precios superiores a los establecidos. En Bolivia el precio de los carburantes está subvencionado.

El dirigente de los transportistas Franklin Durán criticó al presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Santos Ramírez, de quien a pedido su renuncia. "En todo el país hay crisis por la falta de capacidad para conducir YPFB. El señor Ramírez debe renunciar'', declaró el lunes.

Ramírez reconoció el fin de semana que la escasez se debe a una falta de producción debido a que en los últimos años no se realizó suficientes inversiones.

Informes oficiales indican que la producción diaria de petróleo es de unos 47.000 barriles mientras que la demanda interna es de 50.000 barriles.

La producción de gas natural es de unos 41 millones de metros cúbicos diarios y el estancamiento de la producción ha impedido al gobierno cumplir compromisos con Argentina. La exportación a ese país alcanza a 1,9 millones de metros cúbicos diarios de los 7 millones acordados. Brasil es el otro mercado con compras diarias de 31 millones de metros cúbicos, mientras que poco más de seis millones se destinan al mercado interno.

Ramírez dijo que la instalación en los próximos seis meses de una nueva planta separadora de líquidos del gas natural cubrirá la demanda interna de gas doméstico, mientras que un aumento en la producción de diesel llevará más tiempo.

La producción de ese carburante no cubre la demanda interna por lo que el país debe importarlo de Argentina y Venezuela.

Empresarios agropecuarios del oriente anunciaron que la escasez de diesel provoca severos perjuicios en el inicio de la siembra agrícola.

Las inversiones petroleras en Bolivia comenzaron a caer desde 1998. En 2006 alcanzaron a 198 millones de dólares y en 2007 a 211 millones de dólares.


Según expertos, la nacionalización de los hidrocarburos que decretó Morales en mayo de 2006, desalentó las inversiones de las multinacionales petroleras que desde entonces pasaron a convertirse en operadoras de YPFB.

Sin embargo, el país incrementó sus ingresos de 559 millones de dólares en 2004 a 1.971 millones el año pasado, también por efecto del aumento en el precio del petróleo.

El cambio de reglas tributarias permitió al estado desde entonces percibir el 82% de la renta petrolera mientras el 18% se llevan las empresas.
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