Los campesinos y mineros se concentran en Cochabamba para vigilar el encuentro entre el gobierno y prefectos. En el segundo día no está ni Morales ni tres prefectos opositores. En el otro cerco otros masistas avanzan hacia Santa Cruz.
En el segundo día de las negociaciones entre el gobierno y los prefectos, el secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, llegó ayer a Cochabamba como observador y pidió terminar con las manifestaciones, para que el diálogo pueda avanzar.
La tensión crece en la llajta por la presión de los sectores sociales afines al MAS, que se declararon en vigilia permanente con dinamita en mano, a la espera de resultados del diálogo.
Otro grupo afín al gobierno y que ha mostrado armas de fuego, amenaza con ingresar a Santa Cruz, donde precisamente anoche se inauguró una importante muestra ferial.
El representante de la OEA arribó al aeropuerto de El Alto a las 10.55, acompañado del delegado de la Unasur, Juan Gabriel Valdez, y el subsecretario de Asuntos políticos de la OEA, Dante Caputo, para unirse a las mesas de trabajo entre el gobierno y las regiones, previa reunión con el vicepresidente, Álvaro García Linera y el canciller boliviano, David Choquehuanca.
En sus primeras declaraciones, Insulza, dijo que todos tienen que esforzarse para ayudar a la pacificación en el país, pero dejó en claro que la decisión está en manos de los propios bolivianos y no de los organismos internacionales.
"Lo ideal sería que hubiese calma y tranquilidad, ya que el diálogo está instalado y hay que esperar sus resultados", dijo el secretario, haciendo un llamado a terminar con las protestas e insistiendo que se debe volver a la calma. Refiriéndose a que los edificios públicos continúan tomados en algunas regiones.
Los representantes de la OEA y Unasur se trasladaron al centro de convenciones El Manantial, donde se lleva adelante el trabajo técnico de las tres mesas de negociación en IDH -Regalías, autonomías y nueva Constitución y las designaciones del Poder Judicial, que se realizan en ausencia del presidente Evo Morales, quien viajó a Panamá para recibir una distinción y de los prefectos de Santa Cruz, Rubén Costas; del Beni, Ernesto Suárez y de Chuquisaca, Savina Cuéllar, quienes volvieron a sus regiones.
Mientras en el centro de la capital cochabambina una ruidosa marcha de mineros, que utilizó la detonación de más de una treintena de cartuchos de dinamita, inquietó a la población. El presidente de la Federación de Mineros, Andrés Villca, sentenció a los prefectos a "respetar la política de cambio del gobierno, pues de lo contrario hallarán entre los mineros a sus opositores".
En el fondo, las diferencias son porque el gobierno de Morales insiste en aprobar su proyecto de Constitución Política del Estado y centralizar los recursos económicos y cinco regiones exigen la devolución de una renta petrolera (IDH) y la consolidación de mayor descentralización con autonomía.
pronunciamiento internacional
A la espera de Morales • El vicecanciller Hugo Fernández confirmó que la agenda del secretario de la OEA, Miguel Insulza, contempla una reunión en Cochabamba con el presidente Evo Morales a su regreso de Panamá y volverá dejando a Dante Caputo como su representación.
Observadores • Los organismos internacionales que están como facilitadores en el encuentro son de Unasur los embajadores de Brasil, Frederico de Araujo; Colombia, Silvia Benavides; Ecuador-encargada de negocios, María Arboleda y otros 4 representantes. De la Unión Europea está una delegación de cinco personas de Gran Bretaña y Francia. Además de la Iglesia Católica, Evangélica y Metodista.
Apoyo a Unasur • La Unión Europea en un comunicado emitido por la embajada de Francia apoya la resolución de Unasur en el Palacio de la Moneda, donde ven un acuerdo para la apertura de un diálogo nacional. Manifiestan la predisposición de aportar en la reconciliación y acercamiento de las partes en Bolivia.
En duda la democracia en Bolivia
El vocero del departamento de Estado de Estados Unidos, Sean McCormack, puso en duda la vigencia de la democracia en Bolivia y vaticinó que a la larga la ciudadanía intensificará su insistencia para que el Gobierno retome el rumbo democrático. El funcionario, lamentó que en el continente se esté dando un giro hacia las autocracias, refiriéndose a Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Cuba.
“Hugo Chávez y Evo Morales fueron elegidos democráticamente, pero ninguno está gobernando de manera democrática”, dijo McCormack, quien cree que “a la larga, las personas de estos países, así como de otros, insistirán hasta ser gobernados democráticamente. Pero esas son decisiones de ellos y para ellos”, reflexionó.
Fuente
Chapare, un reino de sangre y cocaina
Hace 5 horas
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