miércoles, 10 de septiembre de 2008

Gobierno ordena al fiscal general detenga a autores "intelectuales"

El ministro de la presidencia, apareció hoy en los noticieros televisivos del mediodía anunciando que el gobierno ha ordenado al fiscal general de la nación proceda a la detención de los autores tanto intelectuales como materiales, instigadores y colaboradores del levantamiento popular registrado ayer en Santa Cruz. Por intelectuales se entiende que se refiere al gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas y al presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz Branko Marinkovic, a quienes el gobierno acusó ayer de ser lo promotores de este alzamiento anti Evo.

No es la primera acusación que reciben estos dirigentes. Ya se los ha acusado en innumerables ocasiones de preparar golpes de estado contra el gobierno de Evo, y siempre la respuesta de ellos mismos y de la oposición es que si el gobierno tiene pruebas de actos criminales que dentenga a los acusados, sea quien sea, o de lo contrario el propio Evo se convertiría en cómplice de las acciones delincuenciales que denuncia pero que no enjuicia. Es fácil tirar la piedra y esconder la mano.

Cabe señalar que la detención de dirigentes que no sólo no propician el levantamiento del pueblo sino que tampoco lo pueden contener agravaría aún más la aguda crisis por la que atraviesa el gobierno. Para el pueblo cruceño, la detención de sus dirigentes equivaldría a una declaración de guerra y Evo convertiría en mártires a sus opositores graduándose de dictador con presos políticos.

Indudablemente el "compañero" Evo no tiene un plan para manejar la contra-"revolución". Estará sin duda en consultas permanentes con su mentor Hugo Chávez quien prometió "un Vietnan para Santa Cruz" y que "correría sangre venezolana" para defender a su pupilo.

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Gobierno acusa a Costas y a Marinkovic de gestar golpe

Frente a la toma y saqueo de instituciones públicas en Santa Cruz, el Gobierno acusó al prefecto de este departamento, Rubén Costas, y al líder cívico, Branko Marinkovic, de gestar un "golpe cívico prefectural".

Tras una serie de reuniones que anoche sostuvo el presidente Evo Morales con sus ministros, el Alto Mando Policial y Militar, además de líderes de sectores sociales para evaluar la situación en Santa Cruz y otros cuatro departamentos donde la oposición tomó instituciones y bloquea carreteras, los ministros de Gobierno, Alfredo Rada, y de Defensa, Walker San Miguel, ofrecieron una conferencia de prensa para señalar la posición oficial.

"Denunciamos que estos dos personajes, el señor Branko Marinkovic desde el Comité Cívico y el señor Rubén Costas desde la Prefectura, han alentado, promovido y llevado adelante la violencia en la ciudad de Santa Cruz... ese es el nivel de violencia que en este momento campea no por obra de los ciudadanos que habitan esa ciudad, sino por obra de estos grupos violentos y fascistas que están desatando un golpe de Estado cívico prefectural", afirmó el ministro Rada.

No obstante, dijo que el Gobierno no responderá a esas acciones, en su criterio provocadas por sólo "un puñado de violentos... un grupo fascista".

En esa línea, si bien ratificaron que actuarán con firmeza ante esas acciones, descartaron la declaratoria de un estado de sitio para pacificar esa zona.

"El Gobierno nacional no ha de dictar ningún estado de sitio, como se está proclamando en Santa Cruz. Un millón de habitantes y sus libertades ciudadanas no van a ser alteradas por 500 ó 600 malandrines", dijo San Miguel. Acotó que el Gobierno trabajará en medidas de emergencia para la distribución de hidrocarburos y alimentos.

Finalmente, convocó a la población y a los sectores sociales a que asuman una defensa movilizada de la democracia.

El Gobierno pide señales para ir al diálogo

El Gobierno pidió a la oposición política y regional señales claras, como la suspensión de bloqueos y de toma de institu- ciones públicas, para iniciar un eventual proceso de diálogo.

Entretanto, la oposición decidió mantener su condición de que se deje sin efecto la aprobación del proyecto constitucional y que la Iglesia Católica y los organismos internacionales garanticen ese encuentro.

"Creemos que deben dar muestras y señales claras, no se puede hablar de diálogo y luego amenazar, asumir actitudes de violencia... la oposición podría mostrar señales claras, por ejemplo, suspendiendo sus medidas de presión, evitando seguir con la toma de instituciones, no puedes pedir diálogo y generar vandalismo, tienen que dar alguna señal", afirmó el portavoz gubernamental, Iván Canelas.

Entretanto, el ministro de Trabajo, Wálter Delgadillo, quien buscó acercamientos con el prefecto de Tarija, Mario Cossío, informó que sus intentos aún no tuvieron resultados, porque la oposición exige que el diálogo sea convocado por la Iglesia Católica y la Organización de Estados Américanos (OEA), instituciones que sin embargo indicaron con anterioridad que el acercamiento debe ser directo.

Por su parte, el defensor del Pueblo, Waldo Albarracín, pidió a las autoridades de Gobierno y a los prefectos exigir a la población que deje las acciones violentas y que inicien el diálogo.

MEDIDAS

Gastos • El portavoz anunció que se aplicará el decreto que establece que los daños a las instituciones los pagarán las prefecturas de departamento.

Detenciones • El Gobierno pidió a la Fiscalía cumplir su labor y pedir la detención de las personas que tomaron y saquearon las instituciones del Estado, así como de los instigadores.
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