Cocaleros del Trópico analizan la expulsión de la agencia antidrogas de EEUU, advertida por Morales. Los campesinos ya lo pidieron. El MAS anuncia que asumirá las consecuencias de la acción, que comprometería el ATPDEA.
Los movimientos sociales del Trópico de Cochabamba analizan la expulsión de la agencia antidroga de los Estados Unidos DEA (Drug Enforecement Agency), advertida el sábado por el presidente Evo Morales. Mientras, el MAS apoya esta determinación, pese al costo económico que le significaría a Bolivia.
El jueves 16, el presidente de los EEUU, George W. Bush, anunció que Bolivia quedó excluida de la ampliación de la Ley de Preferencias Arancelarias y Erradicación de Coca (ATPDEA) pues habría incumplido con las metas de erradicación de la droga. Se sumaron a la determinación otros factores que comprometieron las relaciones diplomáticas de ese país con Bolivia, como la expulsión de la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Usaid) y del embajador de EEUU, Philip Goldberg.
De no realizarse la ampliación del ATPDEA, Bolivia sufriría una sustancial pérdida económica por la disolución de unos 20.000 empleos. Además, los empresarios nacionales deberán realizar el pago de altos impuestos arancelarios a EEUU, lo que significaría el cierre masivo de negocios.
“Los movimientos sociales estamos analizando la expulsión y en cualquier momento vamos a pedir el retiro de la DEA de Bolivia, porque sólo desprestigia al Gobierno, y esa no es su función”, anunció ayer el dirigente cocalero de las Seis Federaciones del Trópico, Julio Salazar.
Por su parte, el presidente de la bancada del MAS en el Senado, Félix Rojas, afirmó que si el ATPDEA se ve comprometido con la expulsión de la DEA, “no habría nada más que hacer que asumirlo con responsabilidad”.
“Por delante siempre está la soberanía del país. Si (la extensión del) ATPDEA se ve perjudicada por aquello (por la expulsión de la DEA), no habría nada más que hacer que asumirlo con responsabilidad. Permanentemente se utiliza el ATPDEA como chantaje”, enfatizó.
El senador recalcó que el Gobierno oirá a los movimientos sociales: “Los movimientos sociales son los pilares fundamentales del Gobierno, y el Gobierno va a tomar muy en cuenta su petición y en el momento oportuno va a obrar con soberanía”, declaró.
Por su parte, el jefe de bancada del MAS en la Cámara Baja, César Navarro, acusó a la DEA de ser un “instrumento político militar” en Bolivia que “se infiltra” en temas internos del país.
“Nosotros no podemos poner como pretexto el tener el ATPDEA y ser controlados militar y políticamente por EEUU. Es un beneficio económico para nosotros, pero no puede ser usado como un pretexto de control político en nuestro país”, expresó.
De acuerdo con el congresista, los cocaleros (del Chapare) “saben cómo se ha comportado la DEA todo este tiempo” y por ello solicitan su salida del país.
El sábado, en Santa Cruz, el Jefe de Estado advirtió a la DEA que saldrá del país si realiza “una acción política”. “Si la DEA no hace una acción política, respetamos; si la DEA está haciendo un seguimiento de acción política, es mejor que se vayan”, dijo.
El secretario ejecutivo de la Confederación de Trabajadores Campesinos, Isaac Ávalos, pidió al Presidente la expulsión de la agencia norteamericana: “¿Acaso no tenemos capacidad para controlar las drogas?”, cuestionó.
Fuente
Chapare, un reino de sangre y cocaina
Hace 4 horas
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