Sectores vaticinan una guerra económica por los recursos del IDH

Sectores agroproductivos analizaron las consecuencias que podrían ocasionar los paros y bloqueos a la economía regional y vaticinan una ‘guerra económica’. A pesar de las pérdidas aseguran que prefieren el sacrificio de paralizar ellos sus actividades, a parar obligados por el Gobierno cuando ya no tengan la capacidad de producir.

La lucha por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) y la reinvindicación de las regiones apenas se está iniciando y ya se anuncian extremar las medidas hasta lograr sensibilizar al Gobierno, dado que el diálogo, huelgas de hambres, paros cívicos y bloqueos no lo han logrado.

Propuestas como la del sector ganadero del Beni, de no enviar carne hacia el occidente, son una consecuencia de la desesperación de la población que no se siente escuchada y sólo pretende desarrollar sus regiones. En este sentido, el gerente general de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), Raúl Añez señaló que, a pesar de las pérdidas y si la región y el Comité lo aprueban, ejecutarían la medida en defensa del IDH.

Según Añez, si se llegara aplicar esta medida no sólo se afectaría al sector ganadero, sino que se verían afectados el 25% de la población boliviana, que es la que participa en la cadena productiva, sin embargo las pérdidas económicas podrían ascender hasta los 6 millones de dólares al mes, dado que se dejarían de enviar 500 cabezas de ganado por día, entre faenadas y ganado a pie, significando una pérdida de 250 mil dólares diarios. Todo esto sin contar el movimiento económico en los centros de comercialización y en el transporte y toda la cadena productiva.

Por otro lado el sector exportador, a la cabeza de su gerente general, Oswaldo Barriga, indicó que los exportadores no pueden dejar de exportar y los productores no pueden dejar de producir, pero sí estarán acompañando como sector todas las medidas que hay que llevar adelante en la recuparación por el IDH, dado que para los exportadores significa la construcción de 91 kilómetros de carreteras y 1.500 kilómetros de caminos prefecturales bien mantenidos, significando mayor eficiencia, menores costos y mayor competitividad con bajos precios para el mercado interno.

Barriga aseguró que el paro que costó a Bolivia cerca de 18 millones de dólares, donde aproximadamente 10 millones fueron de la economía cruceña, significó, aproximadamente cerca de 1.5 millones para el sector exportador, sin embargo afirmó que cuando hay paro planificado el producto terminado no se perjudica en su exportación sino su logística, incrementando los costos, además de tener multas internacionales.

“O paramos ahora para hacer una presión todos los sectores productivos y económicos o más adelante nos parará el Gobierno cuando ya no tengamos qué producir y no haya economía en el país y sólo querramos subsistir con las exportaciones de hidrocarburos y minerales cuyos precios están empezando a caer”, afirmó Barriga.

Al respecto, Eduardo Paz, presidente de la Cámara de Industrias, Comercio, Servicios y Turismo (Cainco), advirtió que las medidas que vienen son duras, por el Gobierno insensible. “Si no protestamos no vamos a ser escuchados. Muchas de las políticas públicas están causando un gran daño y sabemos que grandes segmentos de la población necesitan ingresos, pero por el otro lado, un modelo que sólo distribuye la renta de los hidrocarburos para estatizar empresas no tiene futuro.
Fuente: elmundo.com.bo
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