miércoles, 20 de agosto de 2008

Sigo siendo el mismo

Desde que mantengo una línea critica contra el Presidente y su política de odio y resentimiento o mejor dicho de bronca contra lo diferente a lo que representa en su lógica cultural, no faltan personas que me escriben, de diversas formas tratan de descalificarme con insultos groseros y otros con criterio y argumento me cuestionan sin caer en estupideces; a los primeros no respondo, a los segundos les hago conocer que recibí su nota y la leí, el domingo escribí un editorial donde señalé la existencia de dos Bolivia, en la misma no responsabilizo a Evo aunque él solo develó o quitó el manto hipócrita que escondía tanto de todo. Los insultos de ambos tipos de cartas son de converso, que mi pasado izquierdista me persigue y me señala, que me vendí a las logias, que alquilé mi pluma a la oligarquía cruceña, que soy un vendido, un traidor, bajo el supuesto que Evo parecería ser la encarnación de la izquierda en Bolivia, el Chávez nuestro o cosas parecidas, no hago ni la intención de compararlo con Fidel simplemente porque esto parecería una falta de respeto por lo que representa Fidel en el mundo; es más, aún criticando a Chávez como lo hago existen diferencias de dimensiones entre Morales y Chávez quien no deja de ser carismático, conocedor de la historia y académicamente formado como militar , Evo sigo siendo un ignorante, qué se le puede pedir a un hombre que no tuvo escuela, que su formación se limita a tocar una corneta, patear una pelota y cosechar o hacer cosechar su cato de coca (producto básico para la fabricación de alcaloide prohibido), con qué se lo puede comparar si su pasado a él lo condena como subversor del orden, conspirador de la legalidad institucional, luego -por causas y efectos de la historia- Evo tuvo una estrella que le dieron los ciudadanos al elegirlo Presidente Constitucional de la Republica con un apoyo nuca visto, en sus manos tuvo la oportunidad de cambiar la historia, pero al final no pudo y eso se debe a que no se puede pedir manzanas al papayo, ya lo decía el lema de la Universidad de Salamanca: "lo que natura non da Salamanca non presta". Por criticar a Evo soy converso, traidor, vendido a las logias y la oligarquía, solo porque no me hago el ciego, si fuera un alcahuete que por un cargo (El Presidente me ofreció personalmente un importante cargo) lo defendiera como fiera como lo hace Amalia Pando y compañía, quienes después de servir a Goni y Tuto hoy no encontraron mejor oportunidad de convertirse en mercenarios vendiéndose por un espacio en la televisión , o simplemente por estar en una lista de espera para ver qué les ofrecen, esos son los que se alquilan, esos son los que se venden, esos son los que distorsionan la verdad, entonces les devuelvo el insulto, sigo usando el materialismo dialéctico para hacer las interpretaciones de la realidad, sigo admirando la estatura moral de Fidel y la entrega quijotesca de la causa del Che, sigo agradeciéndole a Cuba las oportunidades de estudio y de salud que me dieron, es por eso que a estos falsos apóstoles del socialismo como Evo y la pandilla que gobierna no cesaré de cuestionarlos, de criticarlos, de señalarlos. Mis ideales de formación siguen siendo los mismos y por eso no me presto a ser parte de los soldados de la corrupción que escudados en la ingenuidad de Evo son parte de la nueva oligarquía corrupta y delincuencial que hoy resguardados en un falso concepto ideológico solo lo utilizan para sus beneficios; por lo tanto les devuelvo el guante, vendidos ustedes, mi conciencia es mi guardián.
Fuente: elmundo.com.bo
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